Hace 16 años
Y ahora que se que no interesan tus caricias, como pude demostrarle a tu ironía que mi vida sin tus huesos era infierno. Y yo aun estoy colgada de aquel día que miraste atrás, y luego tu sin en quiebro en tu voz me dijiste adiós. Si supieras cuanto tiempo gasto al día para no pensar en ti. Si supieras cuanto daño me hace tu sonrisa en mi cabeza. Todavía gasto tiempo tratando de inventar la manera de quitarle el polvo a la oscuridad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario